Por qué el día de San Valentín es el más frustrante de todos

Pronto volverá a ser ese día: los corazones, las rosas rojas y las cajas de bombones lloverán a nuestro alrededor y eliminarán el esmalte de nuestros dientes como un dulce tsunami. Un momento muy agradable para todas esas cursis parejas enamoradas que nos rodean, por supuesto. Para el resto de nosotros… ¡no tanto! Durante semanas, nos bombardean con folletos, correos electrónicos, letreros, carteles y anuncios del día de San Valentín. Incluso aunque te escondas bajo una piedra, no podrás evitarlo. Seamos honestos: si no te gusta el día de San Valentín, es realmente frustrante.

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Tal vez seas del tipo de persona a la que no le interesa mucho el día de San Valentín, pero que tampoco tiene nada en contra. O tal vez estás felizmente soltero y no te importa ver a todas esas parejas enamoradas a tu alrededor. ¡Bien por ti! Pero si te gustaría tener una relación o si mantienes una donde quizás ya no te sientes tan feliz, el día de San Valentín es un recordatorio adicional de que (todavía) no lo tienes todo.

Incluso si mantienes una relación feliz, encontrar el regalo perfecto para el día de San Valentín o pensar en la cita romántica perfecta puede resultar muy estresante. Por lo tanto, el día de San Valentín realmente no es divertido para casi nadie. ¿Todavía no estás convencido? Estas son algunas razones más por las que el día de San Valentín es en realidad un día terrible.

Es imposible evitarlo

Si no sales de casa durante un mes entero, no recibes folletos publicitarios, no abres tu correo electrónico, no estás en las redes sociales y no enciendes la tele, entonces existe una posibilidad muy pequeña de que no recibas nada sobre el día de San Valentín. Pero dado que esto es prácticamente imposible, la dura realidad es que durante semanas te bombardearán con corazones, artículos rosas/rojos y textos malos de Hallmark. El romance está en todas partes. ¿Alguna vez te has sentido frustrado o triste y has intentado elegir una película que no tenga una historia romántica? ¡Misión imposible!

Traumas del día de San Valentín

Si eres una de esas personas que recibías un montón de rosas y tarjetas del día de San Valentín de amigos y admiradores secretos en el instituto, puedes saltarte este punto. Pero la mayoría de nosotros simplemente teníamos mala suerte y no recibíamos nada (o una vez una rosa o una tarjeta de tu mejor amigo/a, que también es bonito, pero no es lo mismo). Y aunque ya casi nunca lo pienses, todos los años, alrededor del 14 de febrero, esa sensación de exclusión vuelve a aflorar. El día de San Valentín solo deja un rastro de traumas infantiles.

Estar solo de repente parece raro

Incluso aunque estés plenamente feliz con tu vida de soltero y acostumbrado a estar solo en casa, de repente se genera un ambiente incómodo en torno al día de San Valentín. Esa molesta y punzante sensación de que no debería ser así o de que estás haciendo algo mal. Y por mucho que te resistas, es demasiado persistente para desterrarlo por completo de tu mente. ¡Qué frustrante!

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Estrés de regalos

Durante el día de San Valentín, solo hay una forma de demostrar tu amor: comprar regalos. Y si tu regalo resulta no tener mucho éxito, o peor aún, si es más pequeño o vale menos que lo que tu pareja te ha comprado, solo podemos concluir que simplemente no amas lo suficiente a tu pareja, ¿no? Uf, ¡qué estrés!

Expectativas de regalos

Esto nos conduce directamente al siguiente punto: las altísimas expectativas que rodean a los regalos. Cada año hay que superar el regalo del año pasado, o al menos igualarlo. ¿El año pasado invitaste a tu pareja a pasar un fin de semana en Disneyland? Pues ya puedes ir olvidándote desde ahora mismo, porque eso no lo vas a superar nunca.

Estar soltero no es ninguna tragedia

Los amigos que mantienen una relación tienden a colmar a sus colegas solteros con una cantidad exagerada de lástima cuando se acerca el día de San Valentín. A veces incluso intentan organizarte citas a ciegas para deshacerse de su pena y sentimiento de culpa. Mmm… estoy muy feliz yo solo frente a la tele con una montaña de chocolate a mi lado, muchas gracias.

Mal rollo de tus amigos

¿Crees que estás a salvo de los comentarios de tus amigos si mantienes una relación? ¡Pues olvídalo! Porque un fenómeno habitual es que tus amigos solteros de repente empiecen a hablar en tono condescendiente de tu pareja o de tu relación en general cuando se acerca el día de San Valentín. Consuélate con la idea de que esto se debe sencillamente a la enorme presión que el día de San Valentín ejerce sobre los solteros y que después del 14 de febrero tus amigos volverán a ser igual de agradables que antes.

“Un fenómeno habitual es que tus amigos solteros de repente empiecen a hablar en tono condescendiente de tu relación cuando se acerca el día de San Valentín”.

El amor platónico también es amor

El día de San Valentín se centra por completo en el amor romántico. Pero, ¿el propósito de este día no es celebrar el amor en todas sus formas? Porque ¿qué pasa con el amor entre padres e hijos, el amor por tus mejores amigos y compañeros de trabajo favoritos, el amor por tus hermanos, abuelos, vecinos, primos, tíos, etc.? ¡Estos amores y vínculos de amistad incondicionales son igualmente dignos de una celebración por todo lo alto! Pero si lo haces en el día de San Valentín, inmediatamente serás etiquetado de solitario y patético. En fin. Es una batalla imposible de ganar.

¿Cómo puedo sobrevivir al día de San Valentín?

Entonces, ¿cuál es el mejor modo de lidiar con la frustración que conlleva el día de San Valentín? Vale, el día de San Valentín va de amor, ¿verdad? ¿Y cuál es el amor más grande de todos? Exacto, el amor propio. Así que esta es la oportunidad perfecta para ser egoísta por un día y pensar solo en ti (si es posible, por supuesto). ¿Qué te gusta hacer? ¿Qué te encanta? ¿Qué te da energía? Piensa en lo que quieres hacer y ¡a por ello! ¿Tumbarte en el sofá todo el día y ver películas? ¡Estupendo! ¿Salir y estar al aire libre el mayor tiempo posible? ¡Fantástico! ¿Tomarte algo con tus amigos? ¡Genial! ¿Comprar una montaña entera de comida basura y comértela tú solito? ¡Delicioso! Y así, el 14 de febrero continuará siendo un buen día.

Bueno, tal vez el día de San Valentín no sea tan terrible después de todo 😉

¿Qué vas a hacer este año para el día de San Valentín?